Celebramos el día nacional de la ciencia con un workshop en octubre
El Núcleo Milenio para la Reconstrucción Evolutiva del Medio Interestelar (ERIS) pretende reconstruir la evolución de galaxias, como la Vía Láctea, utilizando árboles filogenéticos. Dado que los árboles son estructuras matemáticas y grafos, con ERIS se está consolidando una colaboración interdisciplinaria entre astrónomos, biólogos y matemáticos, con la finalidad de lograr nuestro objetivo.
En este boletín encontrarás información destacada por ERIS, y como este se sitúa dentro de la ciencia nacional. Para eso hemos hecho una selección de diferentes novedades vinculadas con el mundo astronómico y científico.
Workshop ERIS & Sense en Biobío
Durante el mes de octubre, el equipo del Núcleo Milenio ERIS se trasladará a la región del Biobío para desarrollar en conjunto a Sense Contents su primer workshop. A partir del miércoles 26 de octubre y hasta el 28 del mismo mes, los participantes de la actividad podrán trabajar, desarrollar actividades de divulgación y discutir los avances y futuros desafíos en el trabajo de las distintas líneas de investigación del Núcleo Milenio.
El equipo de ERIS arribará a Concepción el 26 de octubre, periodo en el cual desarrollaran diversas actividades de trabajo y fomentación de la ciencia. En su estancia se pretende compartir de manera lúdica junto a las comunidades escolares beneficiarias de Gen Universal de Concepción, Purén y Lota, realizando actividades que se encontrarán a cargo del equipo de Sense Contents y contará con la compañía de las y los miembros del Núcleo Milenio ERIS. Durante su estadía en la región del Biobío, las asistentes al workshop también tendrán la posibilidad de avanzar en cuanto a sus investigaciones respectivas como agrupación e individualmente.
Día Nacional de las Ciencias, la Tecnología, el Conocimiento y la Innovación
Desde 2018, el primer domingo de octubre se celebra el Día Nacional de las Ciencias, la Tecnología, el conocimiento y la innovación en Chile. El país, tras incorporar la creación del Ministerio de las Ciencias, la Tecnología, el Conocimiento y la Innovación, adoptó la celebración del mundo científico a principios de octubre, siendo celebrado este año el próximo 2 de octubre.
Es deber de las instituciones que se vinculan con el área contribuir a la generación de nuevos conocimientos que vayan en directo beneficio de la sociedad, ya que se debe tener en consideración la importancia que ha adquirido la ciencia y las tecnologías en el desarrollo de las personas y la sociedad. Muchas veces se piensa que la astronomía es una de las ciencias más lejanas del público general, porque no genera una ganancia que se puede ver de inmediato, sin embargo, puede exactamente lo opuesto.
“Se ha demostrado lo fundamental que es el trabajo colaborativo en ciencia para toda la humanidad. Si los equipos de seres humanos de diferentes especialidades pueden lograr algo tan maravilloso al trabajar en conjunto, con una visión o propósito unánime, es posible también ponernos de acuerdo para resolver las problemáticas complejas que nos desafían. Los increíbles avances que estamos logrando en la astronomía demuestran lo que somos capaces de hacer como seres humanos cuando nos ponemos de acuerdo.” Afirma la Astrónoma y directora del Núcleo Milenio ERIS, Paula Jofré.
Chile es uno de los países con mayor desarrollo de astronomía a nivel mundial, no solamente porque en otros países no existen cielos de la misma calidad o los mismos telescopios, sino que también por la gran cantidad de científicos chilenos y extranjeros que a lo largo del tiempo han conforman una gran comunidad.
Astrónomos y poetas se reunieron para una noche de observación astronómica
AstroUDP, en conjunto a Gen Universal y el Observatorio mancomunado de astrofísica OMA, realizaron la “Noche de Telescopio ciclo ACRUX: especial Gen Universal”, en donde participaron más de 300 personas, incluyendo niños, niñas y familias a lo largo del país, llegando a ser una de las noches de observación más visualizadas del año. La actividad, que fue dirigida por Erika Labbé, coordinadora de difusión del núcleo de astronomía de la Universidad Diego Portales, quien en conjunto a Julio Carrasco, director del Festival de Poesía y Ciencia del estrecho de Magallanes, ACRUX y Camilo Garcés de Sense Contents dieron la bienvenida a las y los participantes que estaban conectados a la actividad, la noche del martes 6 de septiembre.
Durante la sesión, las y los asistentes fueron acompañados por los relatos de Paloma Valdivia, autora, ilustradora y editora de libros; María Fernanda Piderit, judoca, traductora e ilustradora, y Alejandra del Río Lohan, autora de los libros infantiles, quienes pudieron interpretar los diversos comentarios de las más de 40 personas que hablaban en el chat, respecto a lo que veían en las imágenes de la Nebulosa del Águila que Manuel Solimano, encargado de manejar las imágenes del telescopio que mostraba en tiempo real, mientras que Álvaro Rojas, miembro del Núcleo Milenio ERIS se encontraba a cargo de las explicaciones astronómicas de los objetos que observamos.
“Es importante que los estudiantes estén desde chicos, que se conecten con la curiosidad natural que a todos nos mueve en la ciencia, somos todos un poco niños y niñas en la ciencia y que no se muera eso, que no lo cohíban por experiencias de falla en lo académico, sino que tratar de recuperar la esencia de todo, las personas que hacemos ciencia no siempre nos fue bien, somos personas que nos gustó y tuvimos que seguir intentándolo hasta poder lograrlo.” Comenta Erika Labbé, encargada de AstroUDP.
Las observaciones de las “Noches de astronomía del ciclo ACRUX”, son acompañadas por intérpretes en Lengua de Señas Chilena, encontrándose a cargo de la Sociedad Chilena de Astronomía (SOCHIAS) a través de su programa "Breaking the Barriers", más los relatos poéticos que pudieron generarse en tiempo real, las personas que estaban conectadas y tenían algún grado de discapacidad auditiva y/o visual no se perdieran el espectáculo que nos ofrecían las imágenes del Observatorio Mancomunado de Astrofísica OMA.
Danielle De Brito Silva

Daninelle De Brito Silva es originaria de São Paulo, Brasil, tiene una Licenciatura en Física de la Universidad de São Paulo (USP) y trabajó en diferentes equipos e instituciones investigativas importantes para adquirir madurez científica de su país, sin embargo, también quería tener experiencia profesional en otros grupos de investigación fuera de Brasil. Mientras se encontraba terminando sus estudios de pregrado, su supervisora anterior, Dra. Paula Coelho, recibió de su supervisora actual, Dra. Paula Jofré, información sobre el nuevo Ph.D. Programa de la Universidad Diego Portales, Chile. Esta instancia se convirtió en una oportunidad emocionante por su flexibilidad al momento de ejecutarse. “Chile tiene muchas oportunidades interesantes para los astrónomos: tanto en términos de telescopios, que me permitirían ganar experiencia observacional y trabajar con datos excelentes, como en términos de una gran comunidad, que me permitiría crear una red profesional.”
Actualmente, Danielle se encuentra estudiando el pasado del Universo utilizando poblaciones estelares antiguas. Como estudiante de pregrado, trabajó con poblaciones estelares extragalácticas para comprender la historia de las galaxias, sin embargo, con el paso del tiempo sintió la necesidad de estudiar nuestra Galaxia, la Vía Láctea. “Cuando se estudia la Vía Láctea se tiene la ventaja de estudiar estrellas individuales, además, este es un gran período para estudiar la Vía Láctea, debido a las recientes y constantes llegada de grandes fuentes de información. La Dra. Paula Jofré es líder en el campo de la Arqueología Galáctica, por lo que pensé que sería bueno comenzar mi doctorado. bajo su supervisión. Después de los primeros meses de mi Ph.D. Vi que trabajábamos muy bien juntas y sigo trabajando bajo su supervisión hasta el día de hoy en proyectos muy emocionantes.”
Por un lado, en su tesis de doctorado, Danielle se encuentra estudiando estrellas viejas en términos de sus abundancias químicas, dinámica y edades para desvelar el pasado de la Vía Láctea y también su historia de acreción. Por otro lado, se espera construir el primer árbol filogenético de estrellas antiguas utilizando simulaciones, datos de grandes telescopios y también de misiones espaciales.
Estos principios investigativos los comparte con el Núcleo Milenio ERIS, en donde Danielle, tiene dentro de su comité de tesis a Patricia Tissera, Codirectora del Núcleo y a cargo de generar los datos con los que trabaja la estudiante. En este proyecto tienen acceso a toda la historia de las partículas estelares, por lo tanto, pueden saber cómo se identifican las estrellas acretadas en árboles filogenéticos, información muy útil cuando se trata de develar el halo galáctico, ya que es un entorno muy diverso con estrellas provenientes de distintas galaxias progenitoras. “Estoy trabajando activamente en este proyecto ERIS, ya que uno de los objetivos de mi investigación sobre estrellas antiguas es crear un árbol filogenético de estrellas antiguas para reconstruir la historia de ensamblaje antiguo de la Galaxia.”
Cambio de color de Betelgeuse
La vida de las estrellas es larga y duradera, por lo que por lo general no observamos muchos cambios en el transcurso de la historia humana, sin embargo, existen excepciones. Recientemente, un estudio reveló que Betelgeuse, una de nuestras mejores candidatas para ver una supernova estallando "en el patio de nuestra casa", entró en su fase supergigante roja actual hace tan poco tiempo que Ptolomeo probablemente la consideró amarilla cuando estaba marcando los límites, en los que todavía basamos las constelaciones en la actualidad, 1900 años atrás.
Las supergigantes rojas, como Betelgeuse, son la última fase de la vida de una estrella masiva. Estas cambian cuando han agotado el hidrógeno de su núcleo y han comenzado a fusionar elementos progresivamente más pesados en una capa alrededor de un núcleo de helio, siendo para Betelgeuse, el fin en una explosión de supernova, con una especie de vida futura como una estrella de neutrones. Las estrellas masivas como Betelgeuse tienen vidas mucho más cortas que el Sol, pero aún viven millones de años.
Sin embargo, un artículo en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society señala que los antiguos no describieron a Betelgeuse como una estrella de color rojo. Alrededor de la época de Jesús, el erudito romano Hyingus se refirió a Betelgeuse con un color amarillo anaranjado similar a Saturno, considerandose por los autores evidencia de cuán nueva es su fase de supergigante roja.
El hallazgo nos dice algo sobre el futuro de la famosa estrella. Sabemos que estrellas tan masivas como Betelgeuse pasan alrededor de 1,5 millones de años como supergigantes rojas antes de convertirse en supernovas. Eventos como su atenuación en 2019-20 provocaron especulaciones de que Betelgeuse estaría próxima a estallar como supernova. En este contexto, se estimó que podrían pasar menos de 100.000 años antes de que la Tierra fuera invitada a un asiento de primera fila para uno de los eventos más espectaculares del universo. Sin embargo, si Neuhäuser y los coautores tienen razón, tenemos que esperar casi los 1,5 millones de años completos de la vida de Betelgeuse como supergigante roja, momento en el cual nuestros descendientes bien pueden haber colonizado planetas aún más cercanos a la acción (o nos hemos eliminado a nosotros mismos).
ERIS, en conjunto al libro Fósiles del cosmos, nos traen charlas, entrevistas y diversos audios relacionados con mundo de la ciencia y astronomía.