ERIS visita el Biobío y a los estudiantes de Gen Universal
Núcleo Milenio ERIS realiza su primera síntesis del año en el Biobío
Durante la estancia del Núcleo Milenio ERIS en la región del Biobío, el equipo tuvo la oportunidad de trabajar y discutir los avances de cada uno de los proyectos que se encuentran realizando, pensando en lo que han aprendido durante el primer año del Núcleo y en los siguientes pasos a dar en cada uno de ellos. Para el desarrollo ideal de las investigaciones es importante saber usar las herramientas informáticas y teóricas, caracterizar sus limitaciones y también las posibles mejoras que se podrían implementar, para así adquirir intuición en su uso e interpretación.
En primer lugar, se obtuvo la información dinámica, a partir del catálogo de Gaia, para estrellas del catálogo de GALAH. El uso de esta indagación tiene como finalidad entender y poner en contexto los resultados que se obtendrán a partir de la realización de árboles filogenéticos con la información química de esas estrellas.
Seguido de esto, a partir del catálogo APOGEE se hicieron árboles filogenéticos con cúmulos de estrellas para así entender si estas, que se sabe que pertenecen a un mismo cúmulo, terminan agrupadas en alguna rama del árbol. Es sabido que son químicamente similares entre sí, pero distintas a las de otros sistemas, por lo que se quiere comprobar si los datos observacionales permiten hacer un árbol que posibilite distinguir los miembros de los diferentes cúmulos.
En tercer lugar, se trabajó en la finalización de la preparación de datos espectroscópicos de alta resolución, los cuales serán utilizados en la reunión científica Extending the Gaia Benchmark stars Optical vs. Infrared abundances, actividad a realizarse en el observatorio europeo austral, Vitacura, durante las próximas semanas. Con esto se pretende definir algunos conjuntos de estrellas referenciales de gran importancia, ya que permiten que los resultados de trabajos espectroscópicos diferentes estén en una escala de abundancias químicas homogénea.
Por último, el equipo de ERIS trabajó en la construcción de árboles filogenéticos a partir de los resultados de modelos simples de evolución química. La finalidad es aprender a construir e interpretar estos datos, además, entender las variaciones de los distintos procesos físicos involucrados y como se modifica la información que se puede obtener a partir de la construcción de árboles filogenéticos.
Estudiantes beneficiados con el programa se reúnen junto al equipo de ERIS
Entre risas, asombro, preguntas e hidrocohetes se vincularon niñas, niños y astrónomos a lo largo de tres jornadas en Concepción, Purén y Lota, respectivamente. Los alumnos y profesores de sexto básico del Colegio Santa Luisa de Concepción, Pedro de Oña y Enzo Ferrari en Purén y la escuela Bello Horizonte de Lota pudieron ser parte de las tres jornadas de trabajo en terreno que realizaron el Núcleo Milenio ERIS y Gen Universal.
Las tres ceremonias invitaron a los y las asistentes a descubrir, asombrarse y crear. En cada uno de los establecimientos se realizaron lanzamientos de hidrocohetes, los cuales fueron elaborados por los mismos estudiantes, quienes adicionalmente los complementaron con un relato, simulando el propósito de su misión espacial. Además, el equipo de ERIS dejó a disposición de los establecimientos educacionales ediciones del libro "Fósiles del Cosmos" para sus estudiantes y comunidad escolar.
El colegio Santa Luisa de Lorenzo Arenas, fueron los primeros en recibir a los astrónomos de ERIS el miércoles 26 de octubre. En la realización de la actividad, los científicos tuvieron la oportunidad de explicar las dificultades que se presentan al momento de experimentar. Compartieron con el taller de ciencias, incentivándolos a seguir mejorando en sus procesos, además de ser entrevistados por el taller de periodismo del establecimiento.
En la visita a Purén se sumaron las escuelas Pedro de Oña y Enzo Ferrari, ambos establecimientos de la región de la Araucanía. La comunidad escolar quedó asombrada por la visita de los astrónomos, los cuales tuvieron la oportunidad de vincular la ciencia con la multiculturalidad que mantienen dentro de los establecimientos, con un saludo mapuche y la intervención de los alumnos a través de sus relatos.
En compañía de Matías Aravena, jefe provincial de educación, los astrónomos integrantes de ERIS, directivos del establecimiento, comunidad educativa y junta de vecinos, la escuela Bello Horizonte de Lota inauguró el mural elaborado por el artista penquista Piero Maturana, el cual lleva por nombre “El asombro”.
La obra invita a sus estudiantes a buscar el interés por el universo, aprovechando la curiosidad natural de los y las niñas para desarrollar habilidades importantes, pero por sobre todo para que lo disfruten. Observar el cielo, las estrellas, la luna o las constelaciones provoca en ellos el desarrollo de la imaginación, la sensibilidad, reflexión, investigación y “El asombro”, es por esto que se le dio ese nombre.
Álvaro Rojas
Álvaro Rojas fue como muchos niños que a temprana edad se interesan por el siempre atractivo y variopinto mundo de los dinosaurios. Como suele ocurrirle a muchos niños después de eso, su interés se movió de los dinosaurios a los astros. El detonante de ello fue un pequeño libro de astronomía que encontró en casa cuando tenía 8 o 9 años, "la verdad no era un libro particularmente atractivo, era un texto de los antiguos que tienen hojas de roneo para la mayoría de las páginas, pero que tenía intercaladas algunas páginas con imágenes en papel satinado. Creo que esas pocas imágenes a color de la Luna, los planetas, nebulosas y galaxias me tomaron como por asalto y me invitaron a un mundo del que ya no salí más". Con el pasar de los años esa afición a la astronomía se consolidó, y cuando más tarde llegó el momento de hacer una elección de carrera profesional, la elección fue clara y directa: "durante toda la época del colegio y el liceo sabía que quería estudiar astronomía. En algún momento, descubrí que eso era algo que se podía estudiar, y que se podía hacer aquí mismo en Chile".
Tras estudiar una licenciatura, y luego un magíster, en astronomía y astrofísica en la Pontificia Universidad Católica, Álvaro viajó a Francia, gracias a una Beca Chile, tras el sueño del doctorado y de convertirse en un astrónomo profesional. Durante su doctorado, Álvaro se especializó en arqueología Galáctica, en particular, en el estudio de la química de estrellas viejas situadas en el centro de la Vía Láctea. La idea, es leer en su registro fósil la historia de formación de nuestra Galaxia. "Este es un tema en el que comencé a trabajar en Chile durante mi licenciatura y magíster, y que pude continuar durante mi doctorado al insertarme en el Gaia-ESO survey, un mapeo de estrellas con el Very Large Telescope de Chile con el que se quería estudiar la composición química y los movimientos de más de 100.000 estrellas de la Vía Láctea".
Tras volver a Chile, Álvaro trabajó como investigador postdoctoral FONDECYT, y luego, como investigador postdoctoral del Instituto Milenio de Astrofísica. Desde marzo de este año es académico en la Universidad de Santiago. "Es una gran alegría saber que podré seguir investigando las cosas que me apasionan, ahora como académico de una universidad que está comenzando a incursionar en la investigación astronómica".
Durante sus años de doctorado, Álvaro conoció a Paula Jofré, directora de ERIS. "Nos encontrábamos a menudo en las conferencias del Gaia-ESO survey, ya que yo era estudiante, y ella investigadora postdoctoral trabajando con esos datos. Comenzó medio como broma, pero decíamos que deberíamos encontrar algo para trabajar juntos, unir fuerzas y escribir algún artículo".
La oportunidad de hacer ciencia juntos llegó cuando Paula comenzó a reunir un equipo para postular al que luego se convirtió en el Núcleo Milenio ERIS. "Me invitó a participar como investigador de ERIS, aunque yo aún era un investigador postdoctoral. Fue lanzarse finalmente en una aventura común, y para mí, un empuje importante para mi carrera. Me siento muy afortunado de ser parte de un equipo de investigación tan variado, pero tan lleno de gente con la que da gusto trabajar. Nos hemos lanzado en una aventura en la que aspiramos a reconstruir la historia de formación de la Vía Láctea y otras galaxias usando una venerable técnica que queremos tomar prestada de la biología, pero trabajando para hacerla útil para los astrónomos. Como todos los proyectos de ciencia de frontera, hay riesgos, pero sobre todo, muchas oportunidades de mover los límites del conocimiento, explorar, disfrutar y maravillarse con lo nuevo que descubramos en el proceso".
Misión DART impacta sobre un asteroide y cambia las reglas del juego
Desde finales de septiembre y mediados de octubre, como humanidad fuimos testigos de un evento histórico. El ser humano ha podido revelarse ante su destino, entendiendo esto como el perecer ante la inminente caída de un asteroide en la tierra. La misión espacial DART tuvo sus primeros avances el día 26 de septiembre, siendo la primera prueba de una herramienta de defensa planetaria, que tiene como finalidad el confirmar la efectividad y resguardo de la raza ante el posible impacto de un asteroide.
DART es un satélite que tuvo como finalidad modificar la trayectoria del asteroide Dimorphos, el cual se encuentra orbitando a otro de mayor masa llamado Didymos. Si bien ambos no significan una amenaza para el planeta Tierra, fueron escogidos con la intención de experimentar y ejecutar el plan de defensa planetaria. La misión consistió en probar si era posible modificar la órbita de un objeto masivo. Tras dos semanas desde el impacto de DART, se logró una modificación en la órbita de Dimorphos de 32 minutos aproximadamente, si bien se tenía pensado en un principio que fuera una desviación de tan solo 73 segundos, se logró superar esta marca.
Es cuestión de tiempo para que ocurra un impacto de un asteroide en la tierra, pudiendo ser pronto, dentro de cientos, miles o tal vez millones de años; sin embargo, tarde o temprano puede ocurrir. Actualmente, se cuenta con las herramientas necesarias para lograr detectar si un cuerpo celeste se dirige hacia el planeta, aunque los avances tecnológicos deben profundizarse en la detección de asteroides, esto con la finalidad de lograr una mayor efectividad en el caso necesario de interferir ante un posible e inminente impacto con la Tierra.
ERIS, en conjunto al libro Fósiles del cosmos, nos traen charlas, entrevistas y diversos audios relacionados con mundo de la ciencia y astronomía.